martes, 24 de noviembre de 2009

Regalo


Déjame nacerte, envolverte, cobijarte, acunarte, alimentarte, protegerte, rodearte con mi brazos largos como el mundo entero y calientes como esta sangre que golpea mis dedos. Déjame hacerte un ovillo exquisito sobre mi vientre ansioso, déjame dormirte, buscar con mi boca tus labios tiernos, respirar tu cuello húmedo, registrar tu cuerpo, colonizarte por partes, nombrarte y bautizarte mío. Déjame descansarte, soñarte en un cuento que comenzó con tu piel desnuda sobre la mía sorprendida, enamorada y condenada a ti.
Déjame este día dejar de existir un rato en tu abrazo de hombre bueno, amor.
Hoy, vida mía, regálate a mi.

6 comentarios:

  1. ¡Qué momento más dulce! Ojalá puedas dejar de existir por mucho rato en un brazo así de bueno.
    Más besos si caben.

    ResponderEliminar
  2. Deja que las flores de la vida crezcan en tu jardin!!! Brillante. Abrazos.

    ResponderEliminar
  3. Es un regalo mutuo.
    Simplemente hoy escribes con el latido al aire.
    Precioso.

    Besos

    ResponderEliminar
  4. Siempre que te leo, rememoro ríos que se secaron, abrazos que se marchitaron. Pero aún quedan los nombres que grito en las orillas de la noche: "Leonora, Leonora; Marcela, Marcela; Anita, Anita; Vincenza, Vincenza..."

    Ruidos de piedras, sonidos del olvido, cenizas y ventanas clausuradas hace mucho tiempo...

    ResponderEliminar
  5. hola ^^ ..... tu blog me a encantado... te dejo la dire del mio^^
    http://scriptum-in-mortis.blogspot.com/

    ResponderEliminar

Y tú, ¿qué quieres decir?