
Desperté por el sonido de una gota . Por un momento no entendí nada. Estaba hundida en el agua de la tina, ya helada. Comencé a temblar. Mis manos estaban ateridas de frío. Cayó otra gota desde la llave. Estaba tan mareada que al tratar de ponerme de pie, volví a caer, golpeé mi cabeza y derramé agua hacia fuera. Logré salir empapada y me cubrí con la toalla. Seguía temblando y mi cabeza estallaba. Fui pisando frascos mientras salía. Mi pieza era un caos. Había olor a humo y mi ropa estaba tirada por todos lados. Me recosté en la cama deshecha. ¿Estará lloviendo afuera?.
Continúo...
ResponderEliminarMi querido mentecato, dame una historia oscura para iluminar mis sueños.
ResponderEliminarPodría darte un sueño para iluminar una historia oscura...
ResponderEliminarQue bellísima manera de llover... qué bellisima manera de soñar, de expresar, de escribir. FELICIDADES. uN BESO MUY GRANDE por tu talento.
ResponderEliminarHabrà sido una lluvia de estrellas que te inundò del alma de sueños? Abrazos.
ResponderEliminarafuera siempre llueve, lo que tiene que importar es si llueve adentro...
ResponderEliminarsaludos...
Otro sueño tal vez?
ResponderEliminarSaludos lady pasión!
El silencio de la lluvia también perfora el alma.
ResponderEliminarTu alma llueve tinta. Tus ojos llueven luz sobre este mundo gris de mierda. Yo vivo de esa tinta, de esa luz.
ResponderEliminarMil besos.
Uno en cada peca.